:: Paula Márquez (Insta: @paulamarquez13)
Este Halloween sacad al niño que lleváis dentro y, a falta de fiestas, podéis compraros unas cuantas chucherías y disfrutar de una buena película de terror. Yo os traigo en esta entrada algunas de las pelis que más me gustaron en mi infancia y que sigo disfrutando a día de hoy. ¡Empecemos!
Empezaremos fuerte con Los mundos de Coraline. Nadie que la haya visto dudaría en que esta película es una de las más siniestras. El concepto de extirpar los ojos para robar el alma de sus dueños y suplantarlos por botones era bastante espeluznante.
Lo mejor de esta película es la ambientación de la trama. El contraste entre los dos mundos en los que se adentra la protagonista es fascinante. Es muy divertido, además, el poder descubrir los diferentes rincones de la casa, como el jardín, y también las casas de sus vecinos. Por otra parte, los personajes de esta película son muy peculiares e interesantes y podemos disfrutar de ellos de forma doble porque en el otro mundo aparecen con otra personalidad y aspecto. Esta película te mantiene en tensión hasta el último momento pero a la vez disfrutas viviendo la aventura junto con Coraline.
¿Qué me decís de La mansión embrujada? El famoso Eddie Murphy en el papel de agente inmobiliario que quiere pasar un finde con su familia hace que todos acaben atrapados en una mansión embrujada de Nueva Orleans, ya que, como siempre ocurre en estas películas, empieza a llover y se ven obligados a quedarse en la mansión.
De pequeña disfrutaba viendo como cada miembro de la familia iba perdiéndose por la mansión y sus alrededores y descubriendo secretos de esta y del propietario.
Hablemos ahora de la mítica Monster House. Otra vez la casa tiene protagonismo en la historia, o más bien en este caso es la protagonista. D.J. Walters es un niño que vive justo enfrente de un vecino cascarrabias que vive en una misteriosa casa. Junto con sus amigos, descubren que la siniestra casa tiene vida así que deciden entrar para matarla desde su centro de poder, la caldera. En esta película el espectador puede acompañar a los protagonistas en su misión y aterrorizarse con ellos por los sustos que nos va dando la casa con alma.
Por último, como no mencionar las películas de Scooby Doo (me refiero a las live-action). Destacaré la segunda película en la que podemos ver al famoso equipo de detectives resolviendo el misterioso caso en el que hay un inventor loco que ha creado un laboratorio de monstruos y accidentalmente la pandilla los libera por la ciudad. A lo largo de la película podemos partirnos de risa y seguir la misión del grupo para acabar con estos seres y descubrir a su inventor.
De Cine 