Actores y directores, ciencia-ficción, Clásicos, Críticas, PELÍCULAS, Terror

Este Halloween nadie podrá oír tus gritos

:: Rubén Giner

¡Feliz Halloween! Este año tenemos una celebración de la noche de brujas un tanto peculiar. No pretendo frivolizar al respecto, es muy importante que todos sigamos las directrices sanitarias. Tenemos un toque de queda en vigor que nos obliga a regresar prontito a casa, por lo que no podemos alargar mucho la fiesta. No obstante, es la ocasión perfecta para enfundarnos nuestro pijama de hombre lobo, coger un bol de palomitas bien lleno y retozar de miedo entre gritos de agonía y espanto frente al televisor, como un gorrino en una cochiquera.

Para muchos va a ser una buena noche de cine. A lo largo de la semana hemos citado unas cuantas películas y series que os pueden servir como recomendación para esta noche, por lo que os invito a que repaséis los últimos artículos dedicados a esta temática.

Voy a intentar ponerme serio para hablar de mi propuesta, ya que se trata de una de las franquicias más respetables del entorno audiovisual. Aunque me encantaría poder hablar de manera extensa acerca de las virtudes de My Little Pony: Friendship is Magic (he prometido dedicarle un post bajo juramento solemne), he querido explorar un poco acerca de una mis sagas cinematográficas favoritas, una que rompió los moldes del terror y la ciencia ficción con tal de sentar nuevas bases: hoy vamos a hablar de la saga Alien.

Como es costumbre, vamos a comenzar por el principio:

Alien, el octavo pasajero (1979, Ridley Scott) 

Cartel promocional de la película Alien: el octavo pasajero (1979).

Las andadas de la criatura espacial favorita de los niños son difíciles de sintetizar pues hubo muchas personas implicadas en el proceso de creación de esta idea. El tirón de la ciencia ficción en el cine tras el éxito de Star Wars, llevó a los estudios de 20th Century Fox a interesarse en la producción de su propia space opera, salvo que esta vez se partiría de una base distinta: una historia de terror transcurrida en el espacio. La titularidad del proyecto se atribuye a los cineastas Dan O’Bannon y Ridley Scott quienes tenían por delante el reto de redefinir un subgénero que hasta la fecha había pertenecido de manera casi exclusiva a las taquillas de la serie B. 

La trama era de una complejidad controlable, por lo que Scott quiso prestar especial atención a los elementos visuales como fuerte apoyo narrativo. Era muy importante que su obra fuese visualmente distinguida, para ello contó con el apoyo del diseñador Ron Cobb, encargado de crear la arquitectura industrial de la nave Nostromo y la gran aportación del artista Hans Ruedi Giger, padre del diseño original del xenomorfo

Ilustración del libro Necronomicon (H. R. Giger) que inspiró el diseño del xemomorfo.

Scott tomó prestado un recurso empleado por Steven Spielberg en Tiburón (1975), mediante el cual no pretendía regalar planos detallados de la criatura con tal de aumentar la incertidumbre del espectador. La iluminación de la película juega un papel muy importante, se empleó el juego de sombras con tal genialidad que se pudieron tomar la libertad de esconder al monstruo a plena vista del público.

Aunque en el elenco se contaba con actores veteranos como John Hurt, Veronica Cartwright o Ian Holm, Scott decidió ofrecerle el peso del papel protagonista a una debutante Sigourney Weaver. Una elección arriesgada por parte del director que pronto se convertiría en uno de sus mayores aciertos, ya que, la interpretación de Weaver convirtió a la teniente Ellen Ripley en una de las protagonistas femeninas más reconocidaas de la historia del cine, un papel que sobrevivió a varios títulos posteriores de la saga. En aquella época no era nada común ver a una mujer ostentar el rol protagonista de una película de ciencia ficción y mucho menos llegar a contemplar la idea de ver a un personaje femenino fuerte como Ripley en el género del terror.

El reparto de Alien: el octavo pasajero.

Como curiosidad: el ciclo reproductivo del Alien fue un elemento muy discutido y tuvo un largo desarrollo. En su etapa larvaria, los Alien salen de un huevo con tal de adherirse a un organismo vivo en el cual incubar, pasadas unas pocas horas, ya están listos para salir a través del cuerpo del anfitrión en un proceso semejante a un parto muy violento. Este fenómeno fue una excusa clave en el guion para introducir al invasor en la nave; sin embargo, Dan O’Bannon quería que esto calara en el público como un acto de violación, uno que jugara psicológicamente con el espectador, que no hiciera distinción y que incomodara en especial a la audiencia masculina. En el documental The ‘Alien’ Saga (2002) O’Bannon respondió: «Una de las cosas que más perturban a las personas es el sexo […] Así que me dije: así es como voy a irritar al público; los voy a agredir sexualmente. No voy a ir detrás de las mujeres, voy a inquietar a los hombres. Voy a poner cada idea que se me ocurra para que todos los hombres se crucen de piernas».

Un alien en su etapa larvaria, conocido popularmente como Facehugger.

Set de rodaje de Alien: el octavo pasajero. Shepperton Studios (Londres).

Alien: el octavo pasajero fue galardonada con el premio Óscar a los Mejores efectos visuales. Por todo lo mencionado y mucho más, la película se ha ganado el honor de pertenecer a uno de los clásicos del séptimo arte y también el privilegio de pertenecer al Registro Nacional del Cine en Estados Unidos debido a su «importancia cultural, histórica o significación estética». Puntuación: 24/10 

Aliens: El regreso (1986, James Carmeron)

Cartel promocional de Aliens: el regreso (1986).

A pesar de la buena acogida que tuvieron las aventuras de la criatura espacial favorita de los niños, 20th Century Fox no estaba del todo conforme con la realización de una secuela. Sin embargo, un joven James Cameron (Titanic, Avatar) se encontraba entusiasmado con la idea. El reciente éxito de su última película (Terminator) fue el seguro que necesitaba la malvada compañía de la fanfarria pegadiza para dar luz verde al proyecto.

A pesar de no contar con la confianza del público, James Cameron demostró por primera vez en su carrera que hacer buenas secuelas era lo suyo, prueba de ello fue el éxito de Aliens: el regreso con siete nominaciones a los Óscar, de los cuales ganó el premio a Mejor Edición de Sonido y Mejores Efectos Especiales. Además, Sigourney Weaver recibió la nominación al Premio a la Mejor Actriz, un hito para el género de la ciencia ficción.

Cameron partió de la idea de expandir el universo de Ridley Scott, recogió los conceptos básicos, así como los diseños de Giger para las criaturas. No obstante, quiso darle un toque más personal. Prueba de ello es el diseño de la Reina Alien (adaptada por Cameron en base a los patrones de Giger), para la cual fue necesaria la construcción de una gigantesca estructura que debía ser tripulada por varios operarios con tal de animarla.

La marioneta de cuatro metros de la Reina Alien.

El nuevo director trasladó la acción desde el interior de la nave Nostromo a las entrañas de una colonia espacial construida en el planeta LV-426 (lugar donde se establece el primer contacto con el xenomorfo en la cinta de Scott). Propuso hacerlo a lo grande, de manera que alejó un poco la película del género del terror sin dejarlo totalmente de lado. En su lugar, introdujo elementos del cine bélico y de acción. La propia Sigourney Weaver declaro en una entrevista haberse sentido como una especie de «Rambo femenina». A lo largo de este arco argumental de la saga, Ellen Ripley explora su maternidad mediante un desarrollo que contrasta con el resto de personajes (cuya personalidad se mantiene plana).

El reparto de Aliens: el regreso.

La secuela del cásico resultó en otro clásico, lo cual divide a la comunidad de fanáticos de la saga quienes consideran que esta secuela es superior a su predecesora. Yo lo tengo claro. Puntuación: 7/10

Alien 3 (1992, David Fincher)Cartel promocional de Alien 3 (1992).

Hasta el momento, el éxito de las anteriores entregas había asegurado la pervivencia de la saga, por lo que 20th Century Fox demandaba la realización de un nuevo capítulo de la criatura espacial favorita de los niños. Desde un inicio, la realización de esta película estuvo marcada por una serie de turbulentos desacuerdos que repercutieron en la calidad del producto final. La crítica fue especialmente dura con ella, del mismo modo que lo fueron muchos de los implicados en su realización.

Tras pasar por muchos aspirantes a la dirección y sin un guion cerrado, la película fue asignada al director novel David Fincher (Seven, El club de la lucha, La red social). A sus 27 años, Fincher había dirigido varios videoclips para Aerosmith, George Michael o Madonna; pero esta vez se enfrentaba a su primer trabajo en la gran pantalla.

Los únicos elementos claros acerca de la historia eran: la intención de escribir algo nuevo que se alejara de lo visto anteriormente, continuar la fórmula de conjugar terror, ciencia ficción y acción a partes iguales y trazar una continuidad en torno al desarrollo personal de Ellen Ripley. Sigourney Weaver se subió a este destartalado tren de la bruja para interpretar el papel protagonista una vez más, a cambió pidió 11 millones de dólares y cierta capacidad de decisión en el set.

Fotograma de la película Alien 3.

Pero la cantidad diferencias artísticas no hacía más que retrasar el proyecto. A ello se sumaba la cantidad de dinero desechada por falta de concreción, lo que provocó que 20th Century Fox paralizara el rodaje en más de una ocasión.

El resultado final disgustó a la crítica y no cumplió con las expectativas de los fans. Los guionistas David Giler, Walter Hill y Larry Ferguson no quedaron conformes con el producto final. En más de una ocasión, el propio David Fincher ha mostrado desentenderse de la autoría de la película.

David Fincher y Sigourney Weaver durante el rodaje de Alien 3.

Alien 3 decepcionó también al propio Ridley Scott, quien denunció la falta de los elementos característicos de la franquicia. Señaló una falta de cuidado en el tratamiento de una ambientación que no transmitía la tensión y de sus predecesoras. Además, se señaló que el hecho de que la mayoría de los personajes fueran convictos peligrosos no contribuía a que el espectador empatizara ellos. En conclusión: si las entregas anteriores se caracterizaban por el orden y la armonía, en Alien 3 había caos y muchos despidos.

El reparto de Alien 3.

A pesar de todo, me resulta una película muy disfrutable. Muchos de sus detractores la perciben como “lo que pudo haber sido” por encima de lo que es. Es cierto que la película está envuelta en un halo de caos, pero eso no juega en su contra. A mi parecer, no es menos caótica que la segunda entrega (está bien descansar de tanto tiro). Estoy conforme con el final, pero la ejecución me resulta un tanto precipitada. Puntuación: 6/10

Alien: Resurrection (1997, Jean-Pierre Jeunet)

Cartel promocional de Alien: Resurrection (1997).

Todo indicaba que la franquicia parecía haber visto su cierre con Alien 3, pero 20th Century Fox encontró la manera de exprimirla un poquito más. En esta ocasión fue el francés Jean-Pierre Jeunet el encargado de llevar la dirección junto a Joss Whedon (Los Vengadores). Esta película da un salto temporal de 200 años hacia el futuro, y contaba con un guion que rompía de lleno el arco argumental de Ellen Ripley. Sin embargo, 20th Century Fox exigía que Sigourney Weaver volviese a encabezar el reparto, ya que la consideraban un icono de la saga y temían que el espectador perdiera el interés. Weaver aceptó después de una oferta de 11 millones de dólares y un lugar en los títulos de crédito como responsable de coproducción. 

Podríamos afirmar que esta es la película más extraña de la saga. En esta ocasión Jeunet conjuga pequeños gags de humor junto a los clásicos toques de acción y suspense; además, recupera parte de la esencia de Aliens: el regreso mediante sus referencias al cine bélico y el regreso de la Reina Alien. En Alien: Resurrection el terror queda en un segundísimo plano, lo que da lugar a una obra de casi pura ciencia ficción. Entre sus referencias artísticas podemos reconocer elementos del cyberpunk y del biopunk, a través de los cuales se exploran las consecuencias de la alteración genética de forma muy visual y visceral.

Fotograma del Newborn junto a la Reina Alien en Alien: Resurrection.

Si bien es probable que sea la película menos recordada por los fans, muchos la asocian con la introducción de un nuevo eslabón dentro de la mitología Alien: el Newborn, un híbrido mitad humano mitad xenomorfo. Una criatura de grotesco diseño mayormente recordada por una escena final capaz de helar la sangre al más impávido.

Parte del reparto de Alien: Resurrection.

Pese a todo, no es una película que deja del todo indiferente, es entretenida por momentos. Cuenta con las persecuciones características de la saga y está cargada de curiosidades acerca del universo Alien. Un ejercicio de imaginación sobre un futuro todavía más lejano. Puntuación: 4/10

Prometheus (2012, Ridley Scott)

Cartel promocional de Prometheus (2012).

Desde principios de la década de 2000, 20th Century se moría por llevarse a la boca una quinta parte de Alien que retomara los hechos de la anterior entrega. Inicialmente James Cameron era el candidato perfecto para retomar el rumbo de la saga mediante una cinta que explorase el origen de los xenomorfos. Sin embargo, el camino que había llevado la franquicia precisaba de un trabajo que pusiera algo de orden en este cacao espacial. 

Papá Ridley Scott consideró comenzar desde el principio mediante la filmación de una precuela ubicada antes de los hechos de Alien: el octavo pasajero. Scott tomó como punto de partida el enigma del Space Jockey, un misterioso ser que aparecía en la cinta original y cuyo cadáver encuentran los tripulantes de la Nostromo durante la exploración de una nave abandonada en el planeta LV-426. La película nació sobre la expectativa de dar una explicación al origen de esta criatura y su relación con la creación de los Aliens. Una vez decidido el punto de partida, Scott trazó una línea divisoria en la saga mediante la cual declaraba que prescindiría de los hechos acontecidos en Alien 3 y Alien: Resurrection.

Escultura del Space Jockey en el set de Alien: el octavo pasajero.

El guion de la película se desarrolló en un halo de absoluto secretismo. Scott fue especialmente estricto en esto, ya que hizo firmar cláusulas de confidencialidad a sus actores, a quienes solo se les permitía leer su papel de forma dosificada y siempre bajo supervisión. En esta ocasión, la trama entra de lleno en el terreno de la ciencia ficción, dejando la acción a un lado y minimizando el terror.

Prometheus es la primera película de la saga en no introducir “Alien” en su título, esto supone una declaración de intenciones por parte del director, ya que los sucesos relatados no suceden en torno a la creación de los xenomorfos, sino que conciben este hecho como un fin, o eso se da a entender. A pesar de que vemos elementos representativos de Alien en la película (varios decorados y elementos muy reconocibles de la mano de H. R. Giger), Scott centra sus esfuerzos en dar luz al mito del Space Jockey. Para ello crea la figura de los Ingenieros, una raza alienígena de maestros genetistas creadores de vida. El director inspiró esta nueva especie en las teorías pseudocientíficas del escritor suizo Erich von Däniken, creador de la hipótesis del paleocontacto donde defiende que la civilización humana no se desarrolló por su propio pie, sino que fue gracias al contacto con culturas venidas de otros mundos.

Ridley Scott junto a un Ingeniero en el set de rodaje de Prometheus.

En esta ocasión, Scott se rodeó de un elenco de caras muy conocidas para encarnar a sus personajes, actores como Noomi Rapace, Michael Fassbender, Charlize Theron o Idris Elba.

Charlize Theron, Michael Fassbender y Noomi Rapace caracterizados como sus personajes.

Prometheus volvió a dividir a la audiencia, ya que, lejos de resultar una obra esclarecedora, abre más incógnitas de las que pretende cerrar. Si 20th Century Fox buscaba nuevas excusas para estirar su chicle favorito, papá Scotty se las ha presentado bien envueltas con un lacito muy mono y una tarjeta de felicitación. En su periplo por desvelar la identidad del Space Jockey, Scott acaba explorando el origen de la raza humana antes que el génesis de los xenomorfos, y por el camino deja algún que otro error de continuidad que reescribe la obra original. No obstante, la película explora el universo Alien desde la frescura de un nuevo punto de vista y, a pesar de todo, es más respetuosa con la obra original que sus secuelas. Prometheus cuenta con una potencia visual muy superior a sus predecesoras, ya que aprovecha al máximo las técnicas cinematográficas del momento. Su banda sonora compuesta por Marc Streitenfeld es, por primera vez en mucho tiempo, un sello reconocible. Puntuación: 7/10

Alien: Covenant (2017, Ridley Scott)

Cartel promocional de Alien: Covenant (2017).

Alien: Covenant es la última película rodada hasta la fecha. Secuela directa de prometheus y segunda precuela que narra los hechos anteriores a Alien: el octavo pasajero. En ella Ridley Scott trata de afrontar el reto de cerrar los cabos sueltos de la saga de manera muy selectiva y poco satisfactoria para el espectador. 

Prometheus había reescrito los orígenes. Aquel intento incial de Ridley Scott de acercar el terror al cine comercial había dado como resultado todo un universo de ciencia ficción. La obra se había distanciado ya de aquel monstruo que se ocultaba en la oscuridad de la Nostromo y que había hecho gritar a millones de espectadores.

Alien: Covenant se presentó como una apuesta más ambiciosa que su predecesora. No solo cargaba con la responsabilidad de dar explicación a los enigmas planteados en Prometheus, sino también la misión de recuperar los elementos distintivos que hicieron de Alien: el octavo pasajero una de las películas icónicas del cine de terror. La criatura del espacio favorita de todos los niños tenía que volver a casa.

El protomorfo, una especie antecesora del clásico Alien aparecido en Alien: Covenant.

Alien: Covenant consigue recuperar la esencia de una película de Alien sin dejar de lado la continuidad de la entrega anterior. Sin embargo, la historia se repite: en lugar de cerrar incógnitas la película abre otras nuevas. El resultado volvió a polarizar a una audiencia que ya quedó mayormente descontenta tras el desenlace de Prometheus. No obstante, la cinta recibió muchas más criticas positivas que la anterior entrega, lo cual demuestra que este experimento llevado a cabo por Ridley Scott produce un resultado concluyente: el público quiere ver bichos, a los fans les gustan los Aliens, ¡déjate de mi***** Scotty!, dales lo que quieren, que esa gente está loca.

Reparto de Alien: Covenant.

Aunque me dejó la cabeza como un disco de Ana Belén me gustó bastante, le doy mi aprobado. Puntuación 6/10

El fenómeno Alien vs. Predator 

Fotograma de la película Alien vs. Predator (2004, Paul W.S. Anderson).

¡Aquí metemos las manos en mantequilla y nos untamos bien la cara!, y es que, aunque estas películas no formen parte del canon oficial de la saga ¡son una maldita locura! La idea original surgió a raíz de la publicación de un comic homónimo publicado en 1989.

Primer Alien versus Predator (Randy Stradley, Phill Norwood, Chris Warner)

El concepto resultaba jugosísimo para una hambrienta hambrienta 20th Century Fox desde principios de la década del 2000 estaba a la espera del desarrollo de una quinta entrega de Alien. La idea es sencillísima: enfrentar a dos grandes cazadores de la historia del cine por demostrar quién es la criatura espacial favorita de los niños. «Gane quien gane, nosotros perdemos«.

El fenómeno Alien vs. Predator dio para dos películas. Ambas se caracterizan por una fuerte carga de elementos visuales y efectos especiales. El terror queda aparcado para dar lugar a la acción y el suspense. Si te gustan estos elementos es una buena opción para pasar una tarde de sábado.

Fotograma de Alien vs. Predator: Requiem (2007, Colin Strause, Greg Strause).

Lamentablemente no he prestado mucha atención a estas entregas, así que dejo que cada uno le ponga la nota que quiera. Puntuación: ¿?/10

Universo Expandido: comics y novelas

Una Reina Alien voladora, extraída de los cómics de Alien vs. Predator.

Desde el estreno de Alien: el octavo pasajero, pasando por Alien vs. Predator hasta Alien: Covenant, la saga ha dejado un calado en el imaginario popular y trascendido la gran pantalla. Cuando nos referimos a Alien como una franquicia es por que el universo no se ha limitado solo a las películas, sino que ha dejado tras de sí una cantidad enorme de merchandasing, además de cómics, novelas, videojuegos y demás relatos. Muchos de ellos cuidados con tal de respetar la continuidad del canon, y otras que… bueno, ya da todo igual.

Portada de la novela gráfica Batman vs Aliens (2007, Ron Marz)

En dicho universo expandido parece que todo vale, desde diseños nuevos de xenomorfos (a cada cuál más loco e imaginativo) hasta crossovers impensables como la serie de comics Batman vs. Alien (o Batman vs. Alien vs. Predator, en fin… eso).

VideojuegosPortada del juego Alien: Resurrection (2000, Play Station).

Aunque quedan incluidos como parte del universo expandido, los videojuegos traen un par de aportaciones muy interesantes a la saga. La mayoría de las entregas interactivas de la saga pertenecen al género shooter en primera persona y se centran en la acción y en la supervivencia. Ejemplos clásicos de ello son Alien: Resurrection (2000) para PSX, Alien vs. Predator 2 (2001) para PC y PSP o Aliens: Colonial Marines (2013) para PS3, X360 y PC que exprimió al límite los recursos de este género. 

Sin embargo, ninguno de estos juegos explora el terror como lo hace Alien: Isolation (2014). En él entramos en la piel de Amanda Ripley quien trata de seguir la pista de su madre Ellen Ripley tras los sucesos de Alien: el octavo pasajero. Como dato curioso, el diseño de Amanda toma como referencia la imagen de Elisabeth Inglis, madre de Sigourney Weaver.Portada de Alien: Isolation donde vemos a Amanda Ripley.

Para muchos Alien: Isolation es el juego perfecto de Alien. Un título de terror centrado en la supervivencia y que recrea con gran maestría la agonía de la película original, y reproduce con fidelidad la sensación de constante inseguridad. Un juego más que recomendable para los amantes del género, tanto si sois seguidores de la saga como si no. Actualmente está disponible para plataformas como XBOne, PS3, X360, PS4, Switch (de manera exclusiva digital en la eShop) y PC (actualmente rebajado en la plataforma Steam a un precio de 9,24 hasta el 2 de noviembre, ¿qué haces que no vas ya mismo a comprarlo?).

Y aquí concluye un análisis escueto de una de las grandes franquicias de la historia del cine que, aunque de manera posterior se haya consolidado como uno de los pillares de la ciencia ficción en la cultura popular de las últimas décadas, tuvo un origen en el género del terror, del cual guarda elementos muy distintivos que han sido de homenajeados hasta la saciedad, y han inspirado multitud de obras posteriores.

Un saludo y ¡cuidado con el bicho!

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